Luego de una semana marcada por el escándalo mediático y judicial, el actor chileno Benjamín Vicuña reapareció en redes sociales con una imagen que conmovió a sus seguidores: se lo vio jugando y abrazando a Magnolia y Amancio, los hijos que tuvo junto a Eugenia “la China” Suárez, en lo que fue su primer encuentro público tras la polémica por el permiso de viaje revocado.
El conflicto se desató cuando Vicuña decidió impedir que los menores viajaran a Estambul con su madre y el futbolista Mauro Icardi, lo que generó una fuerte reacción de Suárez, quien lo acusó de ser un “mal padre” en un posteo que rápidamente se viralizó. En medio de la tensión, el actor se limitó a responder: “No voy a contestar a tanto odio. La clase de padre que soy lo saben mis hijos, que es lo importante”.

Según trascendió, el temor de Vicuña estaría vinculado a la posibilidad de que Suárez se instale de forma permanente en el extranjero con los niños, lo que afectaría su vínculo paterno. La abogada Valeria Carreras explicó que cualquier viaje de menores al exterior requiere la autorización de ambos progenitores, y que el riesgo no es el traslado puntual, sino una eventual “radicación permanente”.
Mientras tanto, la actriz evalúa recurrir a la Justicia para revertir la decisión y poder compartir tiempo con sus hijos fuera del país, aunque el proceso no sería sencillo. En paralelo, Vicuña se mostró afectado por la situación y decidió alejarse de la exposición mediática, priorizando el bienestar de los menores.
La postal compartida por el actor, en la que se lo ve sonriente junto a Magnolia y Amancio, fue interpretada como un gesto de reafirmación de su rol como padre y una respuesta silenciosa a las críticas recibidas