La provincia de Mendoza, uno de los destinos más elegidos del país en temporada invernal, se encuentra en alerta ante la posibilidad de cancelaciones masivas de vuelos en julio, tras advertencias emitidas por la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA). La situación surge en respuesta al Decreto 378/25, recientemente emitido por el Gobierno nacional, que —según el gremio— compromete seriamente la programación operativa de las aerolíneas.
A pocos días del comienzo del receso invernal, muchas compañías aéreas aún no han podido definir sus cronogramas de vuelos, debido a la falta de información técnica y reglamentaria que exige la nueva normativa. Esta falta de previsibilidad genera un fuerte grado de incertidumbre en provincias turísticas como Mendoza, donde el invierno representa una de las temporadas con mayor movimiento de visitantes, tanto nacionales como internacionales.
Desde APLA calificaron el decreto como una disposición “inconsulta, ilegítima e inaplicable en los plazos actuales”, y señalaron como responsable a la Subsecretaría de Transporte Aéreo por no ofrecer herramientas ni condiciones claras para su implementación. Alertaron que, de no revertirse la medida, los efectos negativos sobre el turismo regional serán inevitables.