Nueva normativa del INV genera incertidumbre en el sector vitivinícola de Mendoza

El Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV) implementó una nueva medida con el objetivo de agilizar y simplificar el régimen de importaciones de productos vitivinícolas. Sin embargo, la normativa ha generado inquietud entre referentes del sector mendocino, quienes aún no tienen claridad sobre si se trata de un mero ajuste burocrático o si realmente facilitará el ingreso de productos al país.

La intención del organismo es optimizar la logística y reducir costos operativos, agilizando la gestión de importaciones. Pero para el presidente de la Asociación de Cooperativas Vitivinícolas Argentinas (Acovi), Fabián Ruggeri, el impacto de la medida aún debe analizarse en profundidad. “La estamos estudiando en detalle y aún no hemos finalizado, no tenemos una opinión cerrada. No se sabe bien si sólo busca desburocratizar o si va a facilitar el ingreso de productos, por eso ha generado dudas”, afirmó.

La normativa introduce cambios en los criterios de ingreso para vinos y otros productos del sector, eliminando ciertas exigencias para países con regulaciones equivalentes a las de Argentina. En estos casos, ya no será necesario un certificado analítico, mientras que para productos provenientes de países sin acuerdos específicos, se requerirá un certificado emitido por la autoridad competente del país de origen.

Desde la Corporación Vitivinícola Argentina (COVIAR), su titular, Mario González, destacó la importancia de mejorar los procesos y facilitar las exportaciones. “Si Mendoza quiere mejorar su exportación, debe mejorar su vinculación con aquellos países que también se dedican a la producción de vinos”, explicó, agregando que el libre comercio puede ser beneficioso para la industria vitivinícola.

No obstante, González también subrayó los desafíos de la competencia internacional. Según el especialista, los exportadores mendocinos deben enfocarse en ofrecer diferenciación en calidad y precio para mantener su atractivo en el mercado. “Si nosotros continuamos con la carga impositiva que venimos arrastrando hace muchos años sobre el sector, la competitividad se va perdiendo y eso sí puede ser un riesgo”, advirtió.